¡¡¡ ZAAAAAAAAAASSSSSSSSSSSSs!!!
-¡Por Dios! ¿Qué mierda te pasa?
-¡¡¡Es por el papelito que encontré en el bolsillo de tu pantalón con el nombre de 'Maryló y un número!!!
-Amorcito... ¿te acuerdas del día que fui a la carrera de caballos?
-Pues sí...
-Maryló era el caballo al que aposté y el número es cuánto estaba pagando por la apuesta.
Satisfecha, la mujer se retiró pidiendo 1001 disculpas...
Días después, estaba él nuevamente sentado cuando...
¡¡¡ZAAAAAAAAAAASSSSSSS!!!
Recibe un nuevo golpe, esta vez con una olla a presión. Más asustado que idiota por el golpe, él le pregunta:
-¡¡¡MIERDA, LA MADRE QUE TE TRAJO...!!!
¿Qué fue ahora ?
-¡¡¡TU CABALLO LLAMÓ!!! .
Jajajjaja
ResponderEliminarQue bueno.
Besos.
Y es que cada vez los caballos son más inteligentes, milagros de la evolución.
ResponderEliminarUn beso